Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de SAMUEL JOAQUÍN FLORES sois, y herederos según la promesa.
Por R. Castillo G. (CCB USA).
El nacimiento de un hombre alegra a quienes se encuentran ligados a él
por un vínculo filial, social o cultural; de diversas maneras, un nacimiento no
pasa desapercibido para nadie; es un acontecimiento especial, único y
particularmente concede un orgullo para los padres y familiares de aquel ser
que acaba de llegar a las vidas de ellos.
Hay nacimientos que marcan los destinos de un grupo social, de un país,
hasta de naciones enteras; algunos hombres nacen para cambiar la vida de miles
de personas; otros más, llegan a este mundo a transformar el rumbo de un
gobierno y algunos a contribuir a la ciencia con algún proyecto que le salvará
la vida a millones de habitantes.
El 14 de Febrero de 1937 en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, nace el
Apóstol de Jesucristo Samuel Joaquín Flores con un propósito divino: cuidar del
pueblo de Dios. Un pueblo que por su oración y cuidado ha salido adelante en
muchos aspectos y que hoy es reconocido como una comunidad religiosa con
valores, con educación y con responsabilidad cívica.
Durante los años 50´s y 60´s, la Iglesia del Dios Vivo, Columna y Apoyo
de la Verdad: La Luz del Mundo; fue perseguida y señalada por no pertenecer a
la religión mayoritaria que en esos años sobresalía en México. La iglesia
padeció en aquellos años, persecuciones, ofensas, calumnias, incluso, llegó a
padecer de maltrato físico hacia algunos de sus miembros; a quienes no se les
daba trabajo por su credo y se les tachaba de analfabetas. Poco a poco el
Apóstol de Jesucristo fue conquistando esas necesidades que, él veía, afectaban
a los miembros de la iglesia; con una visión siempre en una vida mejor, en una
libertad de credo, en oportunidades iguales para los seres humanos; impulsando
siempre con su ejemplo.
Es así como hoy, la iglesia goza de libertades religiosas y sociales
como resultado del trabajo que ha realizado el Apóstol de Jesucristo a través
de más de 45 años de esfuerzo ilimitado por el bienestar de la iglesia en todo
el mundo. Hoy La Luz del Mundo es la segunda iglesia más grande en México, su
membresía da testimonio de esto, sus templos se consideran patrimonio cultural
del país y se distinguen por su arquitectura y su expansión en lo ancho y largo
del territorio mexiquense.
La labor del Varón de Dios ha llevado a la iglesia a ser respetada por
todos los gobiernos y autoridades civiles. Ha impulsado la educación en la
niñez y juventud de la iglesia, creando escuelas de todos los niveles
educativos (preescolar, básico, medio básico, superior y universidad). La
superación de la juventud en México ha sido una tarea que lo ha llevado a dar
su máximo impulso en este rubro, proporcionando becas a quienes no tienen los
medios para continuar su profesionalización o se encuentran en medios austeros
que no les permiten su completo desarrollo educativo.
En el ámbito de la salud ha creado y construido hospitales, asilos,
centros culturales, asociaciones, etc.; todo encaminado al éxito social y
profesional del pueblo que Dios le ha dado. Ha colaborado en forma directa y
puntual en el apoyo y auxilio de las comunidades que han pasado por desastres
naturales, en México y en todo el continente americano; su ayuda no solo ha
sido material sino también en forma espiritual, llevando palabras de aliento a
todas las personas que en esos momentos necesitan de un mensaje de paz y
esperanza.
Desapareció el analfabetismo, desapareció la humillación, hoy la Iglesia
La Luz del Mundo es una comunidad religiosa que resalta por sus méritos, por su
labor social, por su educación, por la defensa que hace de los derechos
humanos, el pueblo del Apóstol de Jesucristo Samuel Joaquín Flores, es un
pueblo libre, que lucha incansablemente día con día con valentía y seguridad
porque sabe que delante de todos va un hombre que nació para darles libertad y
seguridad en todos los aspectos. El Apóstol de Jesucristo consiguió y conquistó
el respeto que hoy gozamos, pertenecemos a un linaje especial del cual nos
sentimos orgullosos; gozamos y disfrutamos de nuestros derechos como asociación
religiosa y estamos seguros que aún nos aguardan más triunfos junto al Varón de
Dios.
En este día le damos gracias al Alto Dios porque le concede un año más
de vida al Apóstol de Jesucristo, es nuestro deseo que el Señor le guarde en
salud y felicidad y que le multiplique todas sus bendiciones. El amor que vive
en nuestros corazones por Usted es el que nos impulsa y nos convida a estar
firmes y a defender a nuestro pueblo en paz y con educación.
¡Muchas felicidades Excelentísimo Apóstol de Jesucristo Samuel Joaquín
Flores!